jueves, 28 de agosto de 2014

HABRÁ QUE CONVIVIR CON LA AVISPA ASIÁTICA

Los apicultores creen que habrá que convivir con la avispa asiática

Más efectivos para retirar los nidos de avispa asiática e incrementar la instalación de trampas a finales del invierno, para impedir así que aniden. Esa fue la reivindicación y principal conclusión a la que llegaron más de doscientos apicultores gallegos, que se reunieron en la localidad pontevedresa de Tomiño esta semana para poner en común uno de los problemas que trae en vilo al sector: la avispa invasora que ataca sus colmenas.



"La avispa asiática va a quedarse aquí, vamos a tener que convivir con ella, así que a largo plazo también dará problemas al sector vitivinícola y al de las frutas",  

La variante de avispa asiática presente en  España (Vespa velutina nigritorax) mide entre 2,5 a 3 centímetros -"no es de las más grandes entre los avispones" y muestra una coloración "muy característica y reconocible", con un abdomen completamente negro que evoluciona al naranja en la punta y unas patas también negras o marrones oscuras en la parte próxima al cuerpo pero naranjas en el extremo exterior.



Las actuales trampas que marcan los protocolos de actuación   son "insuficientes" y "poco efectivas" en opinión de  expertos, que abogan por reforzar la instalación de estas trampas a finales de invierno y cerca de "las camelias japónicas", para evitar así que las avispas realicen sus nidos; es decir capturaría a las reinas fundadoras de los avisperos.  Habrá que ponerse de acuerdo en  la utilización  algunos de los líquidos atrayentes o venenos domésticos que los apicultores usan en sus trampas. En el programa de vigilancia y control   contra la avispa asiática asesoran sobre la elaboración de trampas caseras y se refieren sobre todo a líquidos atrayentes, como aguas azucaradas, vino o cerveza negra.



Trampas con feromonas

Sin embargo, un técnico vasco del Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario, Jesús Félix Barandika, consultado ayer por posibles estrategias para combatir la expansión de la avispa asiática se refirió al uso, ya propuesto anteriormente, de una feromona sintética con la que atraer grandes cantidades de esta especie y poder así reducir sus números.



Barandika considera que "los pequeños apicultores, que a diferencia de los más profesionales, "no practican la trashumancia" durante el verano son quienes se exponen de forma mayor a ataques de la avispa asiática, son "mucho más vulnerables".

Con respecto a la expansión de ejemplares se ha referido al ejemplo de la provincia de Guipúzcoa, donde los primeros nidos aparecieron en 2010 en torno a San Sebastián e Irún. Desde allí, la avispa asiática se expandió de forma "rapidísima", llegando a cubrir la mitad de la provincia en 2011 y la provincia al completo en 2012, cuando fueron retirados o destruidos cerca de 1.000 nidos.



En la comunidad gallega, la avispa asiática afecta principalmente a la zona de la mariña lucense y las Rías Baixas aunque también se han visto y retirado nidos en la comarca de A Coruña. Los apicultores alertaban esta semana de que una de cada cuatro colmenas de abejas que existen en la comunidad ya habrían sido atacadas por esta especie de avispa.




En algunas playas, como las que se enmarcan en las Rías Baixas, el número de picaduras por avispa se ha cudruplicado en sólo un año mientras que, sin embargo, en las playas de A Coruña ciudad y el área metropolitana las picaduras de insecto a bañistas bajaron un 40% durante este verano.   El daño de las picaduras de la avispa asiática es similar a la de la de otras especies.

martes, 26 de agosto de 2014

LAS ABEJAS PROVIENEN DE ASIA

Las abejas provienen de Asia y no de África

Un grupo internacional de científicos ha secuenciado el genoma de 140 abejas de 14 poblaciones distintas y ha constatado un nivel "sorprendentemente alto" en su diversidad genética, así como que la "Apis mellifera" (abeja de la miel) es, probablemente, originaria de Asia y no de África.



Estas son algunas de las conclusiones de un trabajo que se publica en la revista científica Nature Genetics, liderado por el profesor Matthew Webster de la Universidad de Uppsala (Suecia), y que ha contado, además, con la participación de investigadores de Noruega, Japón, Jordania, Brasil, Sudáfrica, Turquía y España.

Según esta investigación, las abejas parecen descender de un antiguo linaje que llegó desde Asia, hace unos 300.000 años, y se extendió rápidamente por Europa y África.

Este resultado contrasta con investigaciones anteriores que sugerían que son originarias de África.



"El árbol evolutivo que hemos construido a partir de la secuencia del genoma no admite un origen en África", apunta Matthew Webster en una nota de prensa de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia.

La abeja, recuerdan los autores, es de crucial importancia para la humanidad: un tercio de los alimentos (frutas, frutos secos y verduras) que se consumen dependen de la polinización principalmente realizada por las abejas pero también por otros insectos.

Sin embargo, añaden, la pérdida de colonias de estos insectos en los últimos años se ha convertido en una preocupación.

Las abejas se enfrentan a amenazas como nuevas enfermedades o el cambio climático.

Para combatir estas amenazas, es importante entender la evolución histórica de estos animales y cómo se han ido adaptando a los diferentes ambientes en todo el mundo, sostienen los autores.

Webster detalla que, a diferencia de otras especies de animales domésticos, las abejas presentan mayores niveles de variación genética, debido probablemente a que el apareamiento se realiza de forma natural.

Según el investigador de la Universidad de Uppsala, los resultados del análisis genómico muestran, además, que no se observa endogamia por lo que este proceso no estaría involucrado en la pérdida de colonias.

Otras de las conclusiones de este trabajo es que el cambio climático ha afectado fuertemente a las poblaciones de abejas.

Así, según este estudio, las poblaciones en Europa parecen haberse contraído durante las glaciaciones, mientras que las africanas parecen haberse expandido en esos períodos.



Por parte española ha participado Pilar de la Rúa Tarín, profesora en la Universidad de Murcia, quien además aportó las muestras de la abeja ibérica "Apis mellifera iberiensis".

"Hemos encontrado evidencias de que el tamaño de las poblaciones ha oscilado mucho en el pasado, como reflejo de fluctuaciones históricas del clima, y que las poblaciones contemporáneas tienen una alta diversidad genética", señala a Efe De la Rúa Tarín.

Para esta científica, el estudio proporciona una "base adecuada" para futuras investigaciones sobre la influencia de los patógenos y el cambio climático en las poblaciones de la abeja de la miel.


Agencia EFE.
http://noticias.lainformacion.com/ciencia-y-tecnologia/investigacion/las-abejas-de-la-miel-provienen-de-asia-y-no-de-africa-segun-un-estudio_CrKAdgI4d1Q0sGjLTdEFO5/

lunes, 4 de agosto de 2014

EL MONITOREO AUTOMATIZADO

El monitoreo automatizado

Revela la variación interindividual extrema y plasticidad en los niveles de actividad de forrajeo de abejas
Utilizamos la identificación por radiofrecuencia (RFID) para monitorear el comportamiento de forrajeo de abejas automáticamente.

Se ha observado una inclinación constante en los niveles de actividad de las  abejas pecoreadoras


Hemos encontrado que las abejas son flexibles ajustando la actividad de forrajeo de acuerdo a las necesidades de colonias.

Los trabajadores de muchas especies de insectos eusociales muestran un fenómeno denominado a veces como «elitismo», en el que una pequeña proporción de trabajadores individuales que participan en una tarea de realizar una fracción desproporcionadamente grande de la labor realizada por la colonia en su conjunto. Este fenómeno no ha sido bien estudiado en el comportamiento de forrajeo de las abejas (Apis mellifera), ya que   estudios   detallados de la actividad de forrajeo se han visto limitados por la dificultad de rastrear con éxito un gran número de  obreras individuales. Aquí, utilizamos la tecnología de identificación por radiofrecuencia para monitorear el comportamiento de vuelo de abejas de forma automática y generar registros de actividad de vuelo por vida para un gran número de individuos de múltiples colonias. 



Se observó una inclinación constante en los niveles de actividad de las   abejas recolectoras, similar a la reportada en muchos otros insectos sociales. Sin embargo, esta desviación es una consecuencia de la modulación de la actividad de forrajeo por factores ambientales y sociales, más que la existencia de un grupo distinto o sub-casta de  recolectores de élite. Las respuestas individuales a la manipulación experimental  de forrajeo confirmaron que el nivel de actividad se ajustó de manera flexible de acuerdo a las necesidades de la colonia. Estos resultados demuestran que el elitismo en las sociedades de insectos puede surgir como el extremo de un espectro de actividad estable de comportamiento individual que permite a la colonia   responder fácilmente a las necesidades inesperadas en lugar de confiar en las respuestas de un subgrupo definido de forma rígida de las obreras.