La temperatura en el pollo escayolado o ascosferosis
con este artículo hemos querido retomar una enfermedad
recurrente en las colmenas y que, desgraciadamente, lejos de controlarse se
está incrementando en los últimos años.
Se trata del pollo escayolado. No obstante, el enfoque
queremos hacerlo desde los resultados que largos años de investigación nos han
permitido conseguir. Concretamente nos referimos al uso que hemos hecho de la
temperatura para estudiar la importancia de este factor y de otros que pueden afectar
a la aparición de la enfermedad. Breve introducción a la enfermedad. El pollo
escayolado o ascosferosis es una enfermedad en nuestras abejas producida por el
hongo Ascosphaera apis.
Las esporas del hongo son ingeridas por las larvas. Las
esporas germinan en el intestino y es en el momento de la metamorfosis cuando
la enfermedad se desarrolla y manifiesta. En la cría afectada el hongo ataca
sus tejidos y provoca finalmente la muerte y posterior deshidratación, quedando
el cadáver con el aspecto típico que conocemos Para que la enfermedad se desarrolle
es necesaria la actuación de algún estrés sobre la cría, además de haber
ingerido las esporas. El principal estrés es el enfriamiento, que por sí mismo
es suficiente. Pero el uso de este enfriamiento, en diferente grado, nos
permitió estudiar el efecto de otros factores como la humedad, los antibióticos o la falta de polen.
Igualmente, el enfriamiento nos permitió estudiarla
transmisión de la enfermedad o la eficacia (o falta de eficacia) de algún
tratamiento disponible. En cualquier caso, este artículo no va dirigido a estos
factores propiamente dichos, sino al manejo que hicimos de la temperatura para
poder estudiarlos. ¿En qué momento el enfriamiento se convierte en un serio
riesgo para que la enfermedad aparezca? El enfriamiento de la cría en las 24
horas anteriores o posteriores a la operculación es cuando mayor riesgo supone.
este periodo ya el enfriamiento pierde importancia, pues para este momento el
hongo ha sido eliminado y la enfermedad no se produce. Por supuesto, estamos
hablando de cría infectada que ingirieron esporas en su momento. De lo
contrario, la enfermedad no se produciría por mucho frío a la que la sometamos.”El
principal estrés es el enfriamiento, que por sí mismo es suficiente. Pero el
uso de este enfriamiento, en diferente grado, nos permitió estudiar el efecto
de otros factores como la humedad, los antibióticos o la falta de polen.”
¿Podríamos descartar un efecto del enfriamiento sobre la cría
de otra edad?
Nuestra experiencia nos dice que si enfriamos la cría antes de
ocho días (tres de huevo y cinco como larvas) el riesgo de aparición de la
enfermedad es muy inferior, siempre que la cría recupere la temperatura
adecuada (en torno a los 35ºC) a partir de ese momento. Puede ocurrir que este
enfriamiento de las larvas provoque otras enfermedades e incluso la muerte,
incluso que los cadáveres de las larvas puedan tener aspecto similar a las momias,
aunque más pequeñas. Probablemente se deba a un crecimiento oportunista del
hongo. En el otro extremo, cuando el enfriamiento se produce después de que la
cría aparezca ya como pupa (aspecto similar a la abeja adulta, al principio aún
con coloración blanquecina) el pollo escayolado no aparece, aunque la cría
puede morir por otros motivos. Decir que en 25 años trabajando en sanidad
apícola, gran parte de ellos con pollo escayolado, tan sólo en una ocasión
hemos encontrado una pupa momificada por ascosferosis.
¿A qué llamamos enfriamiento?
Muchas veces hemos hablado y escuchado hablar de
enfriamiento de la cría, por lo que es necesario explicar a qué nos referimos
como tal. De esta manera mantuvimos cría, a la que previamente dimos de comer
esporas del hongo, a tres temperaturas diferentes: 25ºC, 30ºC y 35ºC., pudimos observar
el porcentaje de cría que enfermaba y moría de pollo escayolado, siendo muy superior
cuando se mantenía a 25ºC, mucho menos cuando la cría se mantenía a 30ºC y prácticamente
nada cuando la cría era mantenida a 35ºC. Tenemos que recordad que esas
temperaturas sólo era necesario aplicarlas a partir del momento de la
operculación para obtener resultados y que la cría debió ingerir previamente
esporas del hongo. En definitiva, podemos hablar de tres condiciones de
temperaturas ensayadas. Cada una nos sirve para una cosa, como veremos a
continuación:
25ºC es una temperatura que genera un estrés claro sobre la
cría. Nosotros mantenemos la cría a esta temperatura cuando queremos provocar
la enfermedad. Por ejemplo, para saber si la cría de una colmena está
contaminada por las esporas del hongo o si han pasado esporas de un lugar a
otro de la colmena o entre colmenas.
30ºC es una temperatura límite, en la frontera entre el estrés
y la temperatura adecuada. Nosotros utilizamos esta temperatura cuando queremos
probar alguna otra posible causa predisponente que por sí misma no es
suficiente para provocar la enfermedad, pero sí lo puede ser si actúa
conjuntamente con otra, como podría ser la humedad, la falta de alimento, etc.
35ºC es una temperatura adecuada para el desarrollo de la
cría. En otras palabras, si nosotros mantenemos a la cría a 35ºC después de la operculación
no estamos provocando estrés por enfriamiento. En este caso nosotros no
queremos provocar la enfermedad, aunque las larvas hayan ingerido ciento de miles
de esporas. Veamos ejemplos en los que hemos usado las diferentes temperaturas.
Usamos la temperatura de25ºC para saber si las esporas que
pueden estar incluidas en las láminas de cera estampada pueden llegar hasta las
larvas y producir la enfermedad. Para ello fabricamos láminas de cera estampada
en las que incluíamos diferentes concentraciones de esporas. Las láminas se
introducían en colmenas, en la zona de cría y cuando teníamos cría recién operculada
la sacábamos y la manteníamos a 25ºC, por lo que si las esporas habían llegado
hasta la cría y habían sido ingeridas, el enfriamiento provocaría la
enfermedad, y así fue. Igualmente, si se liberaban más o menos esporas, llegarían
a más o menos cantidad de cría y mayor es la posibilidad de que aparezca la
enfermedad, como así fue también, y el enfriamiento fue
fundamental para poder medirlo. También usamos la temperatura de 25ºC para
saber si un tratamiento pudo reducir la infección de esporas en las colmenas.
Cuando hemos querido evaluar la eficacia de un tratamiento en diferentes enemigos
de las abejas, como puede ser varroa, es relativamente fácil, pues aplicamos el
tratamiento a evaluar y cuando acabamos ese tratamiento, aplicamos otro de
eficacia asegurada y comprobamos si aún queda parásitos en las colmenas
recogiendo en un en un fondo los que aún quedaban y que cayeron con el segundo tratamiento.
Desgraciadamente, en el pollo escayolado es mucho más
difícil, pues quedan momias en celdillas abiertas y operculadas, y las esporas permanecen
presentes, por lo que la enfermedad se puede seguir produciendo de forma incluso
permanente. Cuando tratamos de evaluar un producto para el control del pollo
escayolado diseñamos un experimento que consistía en inocular colmenas suministrándoles
esporas del hongo, y posteriormente aplicar el tratamiento de la forma recomendada
por el fabricante.
El reto de este experimento era cómo evaluarla posible evolución
de la enfermedad, para lo que recurrimos una vez más al enfriamiento. La
hipótesis es fue que si el tratamiento era efectivo, la enfermedad aparecería
cada vez menos de forma natural en las colmenas, se producirían menos momias,
por ello menos esporas y por los mecanismos naturales de limpieza y eliminación
de desechos de las colmenas, se produciría una reducción del número de esporas
en las colmenas. Por el contrario, si el tratamiento no era eficaz, se seguirían
produciendo momias en las colmenas y por ello esporas, por lo que el número e
éstas se mantendría o incluso podría aumentar. Por lo que podríamos evaluar la
enfermedad, de forma indirecta, a través de las esporas circulantes en las
colmenas. El diseño para evaluar la enfermedad se basó en la retirada de
porciones de cría en el momento de la operculación y enfriarla a 25ºC. De esta
manera, si había más esporas circulando que podían llegar hasta la cría,
gracias al estrés aparecería la enfermedad y podríamos cuantificar la aparición
del pollo escayolado. Así lo hicimos. El resultado de los ensayos no mostró una
eficacia contrastada del producto.
Usamos la temperatura de30ºC para saber si la humedad puede
desencadenar el pollo escayolado. Por los ensayos previos que habíamos
realizados, sabíamos que la humedad por sí misma no era capaz de desencadenar un
brote de pollo escayolado, pero nos quedaba la duda si actuando conjuntamente
con otra causa predisponente podía aumentarla cantidad de larvas afectadas. En
este caso había tres posibles combinaciones con la temperatura, pero tan sólo una
era válida:
1) Si manteníamos la cría a25ºC daba igual que hubiera alta
o baja humedad, pues la baja temperatura iba a ser suficiente para que la
enfermedad apareciera.
2) Por el contrario, si manteníamos la cría a 35ºC sólo la
humedad podría ser una causa predisponente, y ya sabíamos que por sí misma no
era suficiente.
3) Finalmente, la opción válida era mantener la cría a30ºC,
pues es una temperatura que supone un estrés para la cría pero con una intensidad
inferior, por lo que podríamos evaluar el incremento de la enfermedad con una segunda
causa predisponente, en este caso la humedad. Los resultados mostraron que la
humedad, sumada a otra causa predisponente, podría incrementar algo la
enfermedad, así, la alta humedad junto con la temperatura de 30ºC desencadenaba
la enfermedad en el 7,75 % de la cría, frente al 0,95 % cuando la humedad era
baja y con la misma temperatura.
“La hipótesis fue que si el tratamiento era efectivo, la
enfermedad aparecería cada vez menos de forma natural en las colmenas, se
producirían menos momias, por ello menos esporas y por los mecanismos naturales
de limpieza y eliminación de desechos de las colmenas, se produciría una
reducción del número de esporas en las colmenas.”
Usamos la temperatura de35ºC cuando queremos mantener a la
cría con una temperatura adecuada y evitar que el estrés por enfriamiento pueda
desencadenar la enfermedad. Esta temperatura la usamos frecuentemente como
testigo. Por ejemplo, si quisiéramos comprobar que otra causa predisponente es capaz
de desencadenar el pollo escayolado por sí misma, tendríamos que mantener a la
cría a 35ºC para asegurarnos que un enfriamiento no está ayudando a esa otra
causa predisponente.
¿Qué pasaría si mantenemos la cría por debajo de25ºC
considerando que el enfriamiento es la principal causa predisponente?
Probablemente se hayan llevado la impresión de que cuanto
más enfriamiento de la cría en el periodo en torno a la operculación más pollo escayolado
aparece. Es así, pero con un límite, de manera que si mantenemos la cría a temperaturas
inferiores, pongamos a 20ºC, lo que nos solemos encontrar es que no se produce
o se retrasa tanto la metamorfosis que no aparecen las momias habituales. Lo
normal es que la cría muera, y a veces aparece infectada por el hongo, pero probablemente
eso se deba a que crece de forma secundaria, aunque para asegurar esto son
necesarias más investigaciones. En resumen, a lo largo del artículo hemos
querido mostrar cómo la temperatura, además de ser una causa predisponente que
desencadena el pollo escayolado cundo se enfría la cría infectada de las abejas,
nos ha sido también una herramienta muy útil para entender otros muchos aspectos
relacionados con la enfermedad, algunos citados en el artículo como ejemplos y
otros que no hemos mencionado por no alargarnos innecesariamente.
Probablemente se hayan
llevado la impresión de que cuanto más enfriamiento de la
cría en el periodo en torno a la operculación más pollo
escayolado aparece. Es así,
pero con un límite, de manera que si mantenemos la cría a
temperaturas inferiores,
pongamos a 20ºC, lo que nos solemos encontrar es que no se
produce o se retrasa tanto la metamorfosis que no aparecen las momias
habituales.
Uco universidad de Córdoba
“apicultura” España
Hola,me gustaría saber si por de bajo de 20 grados afecta la la cría que según las imajenes del vidrio figuran y a mis colmenas les viene pasando esto mismo con el pollo escayolado pero yo pienso que podría ser por exceso de temperatura ya que en la Alcarria que yo las tengo esto empieza en el mes de JUNIO Y JULIO pero no antes Un saludo.
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