domingo, 18 de noviembre de 2012
MELANOSIS
H. MELANOSIS
Es una infección fúngica que afecta el sistema reproductivo de las abejas reina, causándoles esterilidad. Es ocasionado por el hongo Mellanosella apis.
ETIOLOGIA. Mellanosella apis, es un hongo muy parecido a las levaduras y cuya taxonomía hasta la fecha no ha sido determinada. Debido a su parecido con las levaduras, el nombre de la enfermedad empieza con H de "hefe" que en alemán significa levadura.
EPIZOOTIOLOGÍA. Se desconoce la distribución mundial de este hongo, aunque se sabe de su presencia en Alemania e Inglaterra.
Afecta a las reinas de las abejas melíferas, aunque las obreras suelen ser portadoras del hongo, el cual llega a la colmena con el polen. Poltev sugiere que el hongo es saprófito bajo condiciones normales y que al igual que la Ascosferosis y Aspergilosis, requiere de ciertos factores predisponentes para desarrollarse; estos factores bien pueden ser los mismos que para estas enfermedades.
PATOGENIA. No se sabe con certeza como se infectan las reinas, pero al parecer ingieren el hongo con la jalea real proporcionada por nodrizas portadoras; Fyg también sugiere que el hongo penetra por la cámara del aguijón. Cualquiera que sea su vía de entrada, el hongo se aloja en los órganos reproductivos de las reinas, causando una coloración oscura (melanosis) y provocando la esterilidad, al parecer debido a una fuerte inflamación que obstruye los oviductos. Las reinas dejan de poner, sus órganos reproductivos se atrofian y son reemplazadas por otras reinas.
DIAGNÓSTICO. Se hace con base en las lesiones de los órganos reproductivos (melanosis) de las reinas y mediante la identificación del hongo en el laboratorio. No existe un cuadro clínico que pueda orientar hacia el diagnóstico.
TRATAMIENTO. No se conoce ningún tratamiento que no sea el cambio de reina, aunque generalmente las mismas abejas lo efectúan.
PARALISIS
PARÁLISIS
La Parálisis o Síndrome de la Abeja Negra, es una enfermedad infecto-contagiosa de las abejas adultas, causada por 2 tipos de virus, el llamado virus de la parálisis aguda y el llamado virus de la parálisis crónica. La enfermedad reviste cierta importancia económica.En 1933 Burnside demostró que el origen de la enfermedad no era bacteriano como se creía, al infectar abejas con fluidos procedentes de macerados de abejas enfermas y filtrados en filtros para bacterias. En 1963, Bailey identificó en microscopio electrónico al virus de la parálisis crónica, y en 1964, al de la parálisis aguda.
ETIOLOGÍA. Parálisis Crónica: Virus irregular, tipo RNA de 65 90 nm de diámetro. Se puede cultivar en
células nerviosas de abejas en células de embrión de pollo. Posee proteínas antigénicas específicas que su permiten identificación mediante pruebas de difusión en gel. Parálisis Aguda: Virus hexagonal, tipo RNA, de 28 nm de diámetro, muy parecido al Morator aetatulas, por lo que hasta 1964, se creía que era el mismo virus. También posee proteínas específicas que permiten identificarlo con pruebas de difusión en gel.
EPIZOOTIOLOGÍA. Esta virosis se ha diagnosticado en Europa, Asia y América, México, Australia, Nueva Zelandia, China, Escandinavia. Su presencia se favorece durante las épocas de calor y sobre todo en colonias cuya reina es altamente consanguínea. Se desconoce con exactitud la forma natural de infección, pero la gran cantidad de partículas vírales que se han encontrado en las glándulas hipofaríngeas y salivales de las abejas, sugieren que la transmisión ocurre por medio de la trofalaxia o por la ingestión de alimentos contaminados.
PATOGENIA. Una vez ingerido el virus, pasa del tracto digestivo al tejido nervioso y al adiposo donde se multiplica. Especialmente se concentra en la zona de la cabeza. Es posible que la sintomatología sea desencadenada por altas temperaturas en el interior de la colmena. Las abejas mueren en 3 a 5 díascuando son infectadas con el virus de la Parálisis Aguda, y en 7 cuando se infectan con el de la Parálisis Crónica.
CUADRO CLÍNICO. El mismo que para Nosemiasis y Acariosis.
DIAGNÓSTICO. El cuadro clínico puede orientar hacia el diagnóstico, especialmente por la presencia de abejas "negras" (sin vellos en el tórax), temblorosas; sin embargo, un diagnóstico definitivo es imposible de realizar en el campo. En el laboratorio, la enfermedad puede reproducirse inoculando abejas sanas con macerados de abejas "enfermas" para un diagnóstico positivo (ver sección de Técnicas de Laboratorio).Otra manera de identificar al virus, es mediante cultivos y pruebas de difusión en gel, así como su observación al microscopio electrónico.
TRATAMIENTO. No existen antivirales específicos hasta nuestros días, pero trabajos experimentales han demostrado que tanto la Oxitetracilina como el azúcar común, inhiben el desarrollo del virus.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)